La biblioteca municipal de Portugalete cuenta ya con casi 10.700 socios
El año pasado se produjeron 539 altas, un incremento que corrobora que las últimas medidas y mejoras realizadas en estos últimos años han resultado positivas para este servicio
Los datos estadísticos de la biblioteca municipal correspondientes al ejercicio 2022 reflejaron unas cifras muy positivas, ya que se incrementó tanto el número de socios como el número de usuarios de este servicio municipal. El pasado año se dieron de alta 539 nuevos usuarios, cerrando a 31 de diciembre con 10.684 socios, y más de 38.000 personas hicieron uso de los servicios (6.273 más que en el 2021). Por el aula de estudio también pasaron más usuarios que en 2021. Así, 4.148 personas hicieron uso de este espacio (664 más que en 2021).
Los prestamos bibliotecarios también crecieron. Se registraron 18.105 préstamos, 1.773 más que en 2021. Los préstamos en castellano siguen siendo los más demandados por los usuarios, representan el 87% de los préstamos realizados.
“Creemos que las últimas medidas y mejoras realizadas en estos últimos años en la biblioteca se ven avaladas por estos datos”, indica la concejala de Cultura, Estíbaliz Freije.
lguna de las medidas implementadas estos últimos años han sido: la ampliación del horario, la instalación de un buzón para devolución de libros, la posibilidad de entregar y recoger libros en la oficina de atención ciudadana de San Roke, la implantación de talleres de lectura, de comic, de escritura, de música, cuentacuentos, etc., el aumento de la partida presupuestaria para la renovación y adquisición anual de fondo bibliotecario, la ampliación de los canales para el acceso al préstamo bibliotecario, y la implantación de nuevos lectores de carné que leen en pantallas móviles.
Además, se han realizado mejores como una nueva sala polivalente para actividades culturales, la instalación de una máquina de auto préstamo, la renovación del equipamiento informático y una mayor accesibilidad en la búsqueda de materiales.
También se ha llevado a cabo una reordenación de los espacios bibliotecarios destinados a almacenaje; una actualización del archivo; una catalogación y puesta a disposición del público de fondos que no habían salido a sala; mejoras para facilitar la accesibilidad a los materiales de los usuarios; introducción de elementos visuales en los libros (pictogramas y marcadores de color en temáticas con mayor demanda; instalación de una máquina de autopréstamo que va a posibilitar a los usuarios realizar los préstamos y devoluciones de todo tipo de materiales de manera autónoma, reduciendo la espera en momentos de mayor afluencia; y renovación de los equipos informáticos destinados a los usuarios, tanto los de la sala de adultos como la infantil.
Velocidad de navegación
“También estamos trabajando en un replanteo del servicio de wifi público que se ofrece para ampliar la velocidad de navegación, algo muy demandado, sobre todo, por las personas que utilizan la sala de estudio habitualmente, que suelen ser estudiantes o personas que están preparando oposiciones”, añade Estíbaliz Freije.