Portugalete será el primer municipio vasco en crear un banco de ADN canino
Se trata de la propuesta más votada por los vecinos en los Presupuestos Participativos, donde también se ha dado prioridad a ampliar la red de videovigilancia y acondicionar los parques infantiles
Portugalete puso en marcha en 2017 un primer proceso de presupuestos participativos con muy buena acogida por parte de la ciudadanía, lo que hizo que el proyecto se repitiera año tras año hasta hoy.
La propuesta más votada en esta edición ha sido la de instaurar un sistema de control mediante el ADN de las heces de los perros, cuyo presupuesto será de 120.000 euros. Sería el primer municipio en Euskadi en implantar esta medida. Los portugalujos también han votado por mejorar la seguridad ciudadana en el municipio, ampliar la red de videovigilancia en diferentes barrios y acondicionar los parques infantiles existentes. “Esta última no entraba dentro de los 350.000 euros destinados al proceso participativo, así que el Ayuntamiento asumirá el resto del coste de esta cuarta propuesta”, explica la concejala de Participación Ciudadana e Innovación Social, Mª José Blanco.
La edil reconoce que las demandas de la ciudadanía portugaluja han ido cambiando mucho a lo largo de los años. «Llevamos organizando este proceso de presupuestos participativos desde 2017 y en las primeras ediciones solían salir a votación temas de obras y urbanismo, pero ahora prevalecen más las medidas sobre medio ambiente, servicios sociales y comercio», asegura la edil.
El procedimiento este año se ha desarrollado mediante dos procesos paralelos: uno dirigido a la población general mayor de 16 años empadronada en el municipio y dotado con un presupuesto de 350.000 euros, y otro centrado en la población joven de los centros educativos de la Villa, a la que se le ha asignado una cifra de 50.000 euros.
De esta manera, entre los días 1 y 7 de abril se llevó a cabo la fase de recogida de propuestas mientras que a finales del mes de mayo comenzó la de votación de las iniciativas ya filtradas por técnicos del Ayuntamiento porque algunas ya se han implementado otros años o simplemente no son viables, por lo que tienen que ser descartadas.