Portugalete rehabilitará una buena parte de su patrimonio arquitectónico
“Portugalete tiene un patrimonio arquitectónico maravilloso que da vida a sus calles y que es fruto de una historia de casi 700 años ligada a un pasado industrial, comercial y marítimo. La villa jarrillera ha sido capaz de conservar la gran mayoría de estos elementos y de convertirlos en un gran reclamo turístico albergando, además, dos patrimonios de la humanidad como son el Puente Colgante y el Camino de Santiago Ruta de la Costa. En este sentido, el alcalde Mikel Torres, explica que, el próximo año, coincidiendo con el 700 aniversario, “queremos aprovechar para poner nuestra ciudad todavía más bonita y potenciar lo que tenemos y nos identifica”.
Para conseguir esto, se llevará a cabo la restauración de tres elementos icónicos de Portugalete. La actuación más relevante abarcará la antigua estación situada en el paseo de La Canilla y se acometerá a lo largo del primer semestre de 2022 gracias a una aportación de 250.000 euros del Ministerio de Turismo. La estación, con un marcado estilo clasicista, se inauguró en 1888 y fue construida en unos terrenos ganados a la ría por el arquitecto Pablo de Alzola. En su día, le dio la bienvenida a la línea de ferrocarril y, actualmente, la planta baja está ocupada por la Oficina de Turismo y unos baños de uso público, y la planta alta por varios departamentos de gestión municipal. El paso de los años y su cercanía con la ría ha hecho mella en su fachada. Además de arreglarla y pintarla, se levantarán unos nuevos baños más amplios y accesibles. Este proyecto se enmarca en el ‘Plan Turístico Nacional Xacobeo 2021-2022’ para impulsar los Caminos de Santiago como producto cultural y patrimonial en todo el territorio nacional.
Un kiosko con 119 años
Por otro lado, la rehabilitación integral del kiosko de la música, con un presupuesto de 85.000 euros, ha comenzado a finales de septiembre. Situado en la Plaza del Solar desde principios del siglo XX, lleva 119 años en pie. Se trata de una construcción de estilo neomudéjar, obra de Emiliano Pagazaurtundua, que fue arquitecto municipal. Tiene una planta octogonal y un forjado de vigas metálicas y bovedillas de cerámica que con el discurrir del tiempo y sometidas al salitre, la humedad y las inclemencias meteorológicas, necesitan unos arreglos. Se van a reconstruir los muros de apoyo, a impermeabilizar el forjado y a realizar un nuevo embaldosado, además de un pintado completo y una nueva instalación eléctrica. No se interrumpirá el mercado de aldeanas durante el mes y medio que duren los trabajos.
A pocos metros del quiosco está la estatua de Víctor Chávarri, dedicada al fundador de Altos Hornos de Vizcaya, del tranvía eléctrico de Bilbao y de la línea de ferrocarril Santander-Bilbao. Este conjunto arquitectónico de 7,5 metros de altura que data de 1903 está fabricado en mármol y bronce y también necesita un lavado de cara, que tendrá un coste de 50.000 euros. Por otro lado, se intervendrán también el resto de elementos que completan la obra, como son la pareja de operarios, un minero y un siderúrgico y una mujer de carácter alegórico a la espalda de Chávarri. «Presenta fisuras y grietas que se han ido estudiando, pero vamos a acometer una mejora para limpiar todo y que no haya problemas con su envejecimiento», explica el alcalde. Se aplicará un tratamiento completo en la piedra, y se rellenarán las grietas.
“Con estas tres actuaciones se ponen en valor algunas de las construcciones más importantes de Portugalete, que llevan aquí más de un siglo y que queremos conservar siempre”, añade Mikel Torres.