La piscina interior de Churruca reabre con la nueva cubierta retráctil
Las obras, que también han incluido una nueva fachada acristalada y la renovación de la iluminación, han concluido antes de lo previsto y suponen un incremento del confort para los usuarios
El pasado 2 de noviembre, las piscinas climatizadas del Muelle de Churruca se abrieron de nuevo al público con unas instalaciones totalmente renovadas, con una nueva cubierta retráctil y una nueva fachada acristalada.
La duración inicial de las obras estaba estimada en seis meses, si bien comenzaron en junio y han concluido el pasado mes de octubre. Han sido, en realidad, dos obras, con proyectos independientes, bien planificados y coordinados desde 2021, para poder ejecutarlos en el presente año, aprovechando el periodo de menor impacto desde el punto de vista del uso: el verano.
El importe total de la inversión ha sido de 925.000 euros (de los que 401.214 han sigo financiados por la Diputación de Bizkaia). El Ayuntamiento de Portugalete logra, con esta actuación, elevar significativamente la calidad de la instalación deportiva.
La nueva cubierta se ha construido utilizando las mejores técnicas disponibles en la actualidad, mediante el uso de materiales como el aluminio y acero en la estructura de cubierta; y de placas de policarbonato celular de elevado aislamiento térmico y reflexión. Asimismo, la nueva envolvente acristalada eleva exponencialmente las condiciones de seguridad y aislamiento.
Por último, se ha renovado la iluminación interior existente para reducir el consumo eléctrico de forma significativa. En este sentido, se ha sustituido 26 lámparas de halogenuro metálico por lámparas LED regulables, que darán la luminosidad adecuada en función de la consigna exterior.
Estos dos proyectos persiguen varios objetivos: incrementar las posibilidades de uso de la lámina de agua, ajustada a la necesidad de la práctica deportiva y sin condicionantes climatológicos; mejorar la calidad de los servicios deportivos ofertados, apostando por el confort de las personas usuarias; optimizar la seguridad ambiental de las instalaciones; y mejorar la percepción de las personas usuarias respecto de las instalaciones para motivar la adherencia a la práctica deportiva y al ocio activo.
A pesar de las obras, se ha hecho más que viable el disfrute de las piscinas durante el pasado verano, ya que, entre los meses de junio y agosto, se inscribieron 1.674 nuevos abonados (un 35% más que 2021, si bien es cierto que la situación de la pandemia condicionó dicho verano).
En cuanto a los accesos, se contabilizaron 100.371 este año (entre el 1 de junio y el 19 de septiembre), un 40% más que en 2021. Y también ha habido récord de venta de entradas, contabilizándose 13.013 (70% más que 2019).
Por otro lado, la impartición de los cursos de natación y de actividades que se desarrollan en la piscina climatizada han comenzado el pasado 7 de noviembre.
